Analogía Redes sociales en la política.
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___Muchos críticos y comentaristas han dicho ya que la crisis contemporánea no entra en el esquema izquierda-derecha, sino en el debate de democracia vs totalitarismo. Coincido plenamente. Es irrelevante hoy en día si el político de turno dice ser de izquierda o de derecha. No importa. La clave está en detectar si es un estadista, un hombre o una mujer respetuosos del sistema democrático, o si se trata de un tirano camuflado en un candidato.
___En el 2024 asistimos a un espectáculo lamentable: el debate en Estados Unidos entre Biden y Trump. Un par de ancianos agarrados del pelo en un geriátrico peleando por quién jugaba mejor al golf. Unos tipos que deberían estar descansando ya, tranquilos, escribiendo sus memorias y dictando conferencias ocasionalmente en universidades prestigiosas. Y no, ahí estaban, aferrados a sus egos, convencidos de que el país los necesitaba, que no podía avanzar sin ellos.
___Ahora, siempre ha habido autócratas y dictadores megalómanos, pero el caso de Trump es muchísimo peor porque se trata de un delincuente ya juzgado por 34 cargos criminales. Se trata de un convicto que tiene un dedo puesto en el botón nuclear en medio de una guerra. Que ese fulano haya llegado al poder en la democracia más importante del planeta confirma la teoría de que no estamos avanzando, no progresamos, sino que estamos involucionando peligrosamente hacia las viejas reglas de las tribus prehistóricas.
___Hacer política hoy en día no tiene nada que ver con las ideas, con un buen programa de gobierno, con tener ingenio y creatividad. Todo lo contrario: se trata de dar una imagen fuerte, rompedora, de alguien que es capaz de atacar al que sea sin contemplaciones. La clave está en cuánta capacidad se tiene para generar odio. Una frase conciliadora y gentil no genera seguidores. En cambio, una frase insultante llena de ira e indignación en contra de alguien genera un torrente de fanáticos que se suman enseguida al ataque. El odio es viral.
___Esa es la razón por la cual varios medios de comunicación internacionales han decidido cerrar sus cuentas en la plataforma X, donde esta conducta es la base principal de la interacción. En noviembre de 2024, el diario británico The Guardian, uno de los mejores por su periodismo de primera línea, comunicó el cierre de todas sus cuentas en la red social X denunciándola por su peligrosa toxicidad. Con pocos días de diferencia, el periódico español La Vanguardia tomó la misma decisión anunciando que dicha red social, perteneciente al multimillonario Elon Musk, promueve noticias falsas permanentemente. Y en un comunicado añadió:
___“Este diario constata que las ideas que atentan contra los derechos humanos, como el odio a las minorías étnicas, la misoginia y el racismo, forman parte de los contenidos virales que se distribuyen en X”.
___Estamos empezando a comportarnos como lo hacíamos al comienzo de la humanidad, cuando las tribus prehistóricas seguían al más fuerte. En la política se trata hoy en día de dar una imagen de fortaleza y de un líder rabioso dispuesto a todo. Hay que mostrar rencor y desprecio, de lo contrario se entra en la penosa categoría de “tibio”, que significa, para estas hordas de energúmenos y furibundos, alguien mesurado y conciliador. No hay nada peor que la imagen dulce, gentil y amorosa de alguien empático que se identifica con causas nobles. Detestable. Para ganar en unas elecciones políticas es preciso mostrar los colmillos. Difícil olvidar la cara de Trump el día en que le tomaron la foto policial. Al día siguiente se imprimieron miles de camisetas y sus seguidores se multiplicaron vertiginosamente.
___La democracia noble e inteligente ya no es popular. Las redes sociales han promovido a un nuevo sujeto político con cara de matón, que sube la voz, que no respeta a nadie y que no solo aborrece el contrapeso de poderes, sino que está dispuesto a perpetuarse en el poder a cualquier precio. Por eso nuestro futuro será cada vez más triste y peligroso.