“En la novela, pero también lo hizo durante su explicación, hizo una reflexión sobre el dolor y aseguró que personalizarlo “es el error de la victimización contemporánea”, pues el sufrimiento es parte constitutiva de la condición humana y no de solo un individuo. Se sufre, más no “yo sufro”, comentó Mendoza que es la forma correcta de concebir esta sensación.”